La primavera es una etapa difícil para los niños que sufren alergias. Gracias a Pekebook, los padres podrán conocer el estado de sus hijos también durante las horas de guardería.

Las alergias pueden hacer que la llegada del buen tiempo sea un momento difícil para algunos niños. Los alérgicos al polen suelen sufrir molestias en esta época debido a la floración de las plantas. Dificultades respiratorias, congestión, picor de ojos o estornudos constantes son algunos de los síntomas que sufren los niños alérgicos. Esto puede hacer que las actividades al aire libre que tanto disfrutarán sus compañeros se les hagan muy cuesta arriba.

Además, algunos tratamientos médicos para las alergias tienen entre sus efectos secundarios la somnolencia. Esto causará que los niños que tienen que tratarse en estas fechas estén más apáticos y su nivel de atención y participación en las actividades de la clases desciendan.

Es importante, por tanto, que las educadoras estén al tanto de qué niños de su clase sufren alergias primaverales: Por un lado, para tener en cuenta su situación a la hora de programar actividades al aire libre; y por otro, para identificar correctamente la causa de la repentina apatía del niño. Hay que tener en cuenta, además, que según el tipo de polen que provoque la alergia, los síntomas serán más fuertes en un período determinado, en función de la época de floración de esa planta. Saber qué alérgenos afectan a cada niño ayudará a la maestra a entender su estado, y evitará algún susto si se organiza una actividad al aire libre. Esto último es aplicable no sólo a los alérgicos al polen, sino también a quienes sufren alergias graves con especial riesgo en primavera y verano, como la alergia a abejas o avispas.

Una forma eficaz de que las maestras recuerden fácilmente qué niños sufren alergias primaverales es incluir la información en la ficha personal del niño en la agenda Pekebook. De este modo, si la educadora no recuerda exactamente cuál de sus alumnos sufría una alergia determinada, lo podrá comprobar con un click desde su tablet.

Si además los niños deben tomar algún antihistamínico mientras están en la guardería, esa información puede incluirse en su ficha, para evitar olvidos, y para garantizar que en caso de baja de la educadora habitual, su suplente estará al tanto de la situación. La maestra puede, además, comunicar a los padres desde la aplicación que la toma se ha realizado correctamente, lo que supone un extra de tranquilidad para ellos. Además, puesto que la maestra puede utilizar la aplicación para enviar un informe diario personalizado de cada niño, esto permitirá a los padres de los niños con alergias hacer un seguimiento del estado de su hijo cuando no está con ellos, y consultar con el médico si observan algo que les preocupe.

Comunicarse con los padres de los niños con alergias a través de Pekebook también nos ayudará a evitar sustos o malos ratos en las actividades al aire libre. Si se está preparando alguna actividad en la que el niño pueda verse expuesto a un alérgeno, la educadora puede contactar con los padres con antelación para exponer el plan de la actividad y decidir cuál es la mejor opción para el niño: participar en la actividad con total normalidad, asistir acompañado de algún familiar por si debe retirarse antes de tiempo, organizarle un plan alternativo…

De este modo, aunque sea inevitable sufrir los efectos de las alergias primaverales, el centro infantil puede ayudar a los niños y sus familias a sobrellevarlos lo mejor posible. ¡Y más con la ayuda de Pekebook!

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